" Como sociedad, tenemos una extraña relación con la corrupción. Si un extranjero revisara las portadas de los diarios de los últimos diez años se llevaría dos impresiones: que en la Argentina hay mucha corrupción y que las personas de este país vivimos por ello en un estado de permanente indignación. El lugar que ocupó el tema durante las últimas campañas electorales lo convencería de que al menos una buena parte de nosotros y nosotras tiene firmes valores morales. Todo lo contrario a lo que sucede con nuestros gobernantes. Si focalizara en los últimos dos años, las espectaculares detenciones de José López, Julio De Vido y Amado Boudou seguramente lo llevarían a pensar que, finalmente, estamos logrando moralizar a nuestra clase política como nunca antes. Si además el observador se pusiese a estudiar algo de historia, el logro se le aparecería como algo titánico. Porque la cor...
Mi bitácora. GUILLERMO GENTA